Repasando fotos de invierno '09 (véase la de arriba) me he cerciorado de lo distinto que es Berlin en verano, tanto más apetecible! Salimos en todas vestidos de esquimal con cara de frío descomunal, nariz de rudolph, ojos de magdalena, y aquél regocijo en las tomas interiores, de rodillas alabando al buen señor que inventó la calefacción. Ahora es al revés: calor fuera frío dentro, pues esta casa viene con efecto iglesia de serie, abro las ventanas para entrar en calor. A Ferre le encantaría - manta para el mundial sin problemas.
Ahora toman sentido todas esas mesas de merendero en las terrazas de bares y restaurantes, para cenar al aire dos personas plato principal y cerveza por el precio que en Chicago te ponían el pan y los cubiertos.